La iluminación en exteriores es esencial a la hora de crear un ambiente determinado (frío, acogedor, meramente funcional, etc), por ello, es esencial saber cómo iluminar tu jardín.

Utensilios para iluminar el jardín

Los principales utensilios o soportes para iluminar un jardín son los siguientes:

  •  para todo tipo situaciones (barbacoas, terrazas, piscina, iluminación funcional, etc.).
  • Aplique: lámparas o focos que se colocan en una pared o cualquier superficie vertical estable.
  • Baliza: señales luminosas que marcan los límites de un espacio, por ejemplo, se pueden utilizar para delimitar una piscina o una terraza.
  • Sobremuros: es una pieza que se coloca sobre un muro o saliente y protege una bombilla en su interior, es muy útil en la entrada de la casa o en un espacio delimitado dentro del jardín.
  • Proyectores: son estructuras de pie que se colocan en el jardín para proyectar una luz a un lugar determinado, pueden ser móviles o fijos y son muy útiles
  • Plafones: lámpara plana que se integra en un techo o una pared y se sirve de un foco para proyectar la luz, su superficie exterior es traslúcida.

Ideas para la iluminación

La iluminación siempre está ligada a las características del espacio que dispongas (tamaño especialmente) y al uso que vayas a hacer del mismo. Si tu idea es utilizar el espacio para cualquier tipo de actividades, tendrás que priorizar la utilidad frente al confort.

Esto no significa que haya que perder el aspecto decorativo, puedes jugar con los elementos mencionados anteriormente para lograr un espacio bien iluminado y con una estética acorde al interior de la vivienda o edificio.

Un ejemplo que se puede utilizar en cualquier espacio, –y adaptado a cualquier finalidad–, es la iluminación que se proyecta en el suelo, perfecta para zonas de caminar. En espacios pequeños se puede utilizar para delimitar el fin de una terraza o porche.

¿Luz cálida o fría?

Esta es una gran pregunta que no hay que pasar de largo, el tono de la luz puede ayudar a crear un ambiente totalmente distinto en el jardín. Las luces cálidas consiguen un ambiente acogedor y relajante, puede ser muy útil para pequeños rincones del jardín (zona con sillas o tumbonas para relajarse, mesa, etc.).

Las luces cálidas se han asociado comúnmente con el ámbito de la decoración, pueden no tener una función meramente útil sino solo estar emplazadas en zonas para disfrutar (luz ornamental). Este tipo de luces son útiles en lugares en los que no se va a realizar una gran actividad ni son tan grandes que necesiten una buena iluminación, puedes sacrificar utilidad en el caso de terrazas o porches pequeños. En estos casos se gana en comodidad y el ambiente que se logra es mucho más acogedor.

Las luces frías se asocian generalmente a actividad y movimiento, son útiles si tienes grandes zonas para jugar con niños, una piscina o simplemente quieres una iluminación intensa para fines funcionales. Este tipo de iluminación es muy útil en grandes zonas para ver (barbacoas o porches).

Menú